martes, julio 20, 2010

Dinámica de observación: Final de la Copa Mundial en Chili's

El domingo 11 de julio acudí a la sucursal de Chili’s de Reforma 222 a observar la dinámica de los comensales durante la final de la Copa Mundial.

Este lugar se caracteriza por tener gran afluencia de adultos jóvenes de clase media alta y por contar con varios televisores en que se transmiten habitualmente partidos de fútbol. Supuse que estas condiciones generarían un ambiente festivo y bastante emotivo entre los comensales ese día, e incluso temí no encontrar lugar.

Sin embargo, no sólo conseguimos lugar a pesar de ser un grupo relativamente grande, sino que las reacciones y comportamientos que esperábamos ver no se hicieron patentes en el grado que suponíamos.

FORMA DE VESTIR DE LOS ASISTENTES

La mayoría se encontraban vestidos de manera casual: predominaban los jeans y playeras o blusas semi formales; hubo unas 5 personas con playeras de la selección española, otras tantas con playeras rojas (que bien podrían aludir a la misma), así como 3 personas con la playera de la selección mexicana. No vimos a nadie portando la playera del equipo holandés.

ALIMENTOS CONSUMIDOS

Prácticamente no vimos platillos servidos en las mesas, sino que abundaban las bebidas alcohólicas y las botanas. En este restaurante suelen encontrarse balanceadas las personas que consumen comidas completas y quienes sólo toman un tentempié, pero con ocasión del partido, esta tendencia se vio modificada.

COMPORTAMIENTO GENERAL

La gente mantuvo conversaciones regulares, que sólo suspendía en los momentos de más emoción del partido. Prácticamente todas las personas en el lugar miraron las pantallas en todo momento.

Cuando hubo jugadas importantes, algunos aplaudieron, varios gritaban y el tono de voz aumentó. Empero, la emoción estaba claramente disminuida si la comparamos con la observada durante los partidos en que jugó México.

SUCESOS NOTABLES

En el instante en que fue anotado el gol, algunas personas se levantaron de sus asientos y se abrazaron; predominaron los gritos y los aplausos, y el ruido atrajo curiosos de la plaza que desde fuera miraban las pantallas del restaurante. Hubo sonrisas, pero también varias personas mostraron desdén.

Los últimos 3 o 4 minutos (entre el gol y el anuncio del campeón) fueron de tensión para algunos y de desencanto para otros.

Cuando se anunció que España era el campeón de la copa, una pareja de ancianos se levantó, se besaron y abrazaron y se unieron después al aplauso masivo.

Debido a la disposición de las pantallas, ubicadas en distintos ángulos, llegó a haber cruces de miradas, que parecieron ser malinterpretados en el momento, pero al notar los supuestamente aludidos que la otra persona en realidad miraba un televisor cercano, notamos en alguna ocasión algunas expresiones de embarazo.